viernes, 28 de abril de 2017

Perdón, sí, a vos mujer.


Perdón por pertenecer a un género el cuál te viola, te asesina, te mata. Perdón porque solamente vos sabes lo que es sentir salir de noche con un nudo en la garganta sin saber si volvés a casa, tener que darle un beso a tu vieja, a tu viejo, a tus hermanos, abuelos, no encontrando algún consuelo, pensando en si fue el último beso. La duda constante de si fue el último mate que tomaste, la última risa que compartiste, la última película que miraste. Salir con el miedo de que algún gil se zarpe, de que te acose, de que te mate. No podes vestirte como deseas, sino para la "sociedad" sos vos la que provocas. Perdón por pertenecer a un género que te manipula sin parar, que te hace creer que el problema sos vos en la sociedad, cuando vos y yo sabemos bien la realidad. Perdón por pertenecer a un género que te robó la libertad, pero aún quedamos algunos que sabemos amar. Si ni el estado, ni la policía las protege, ayudémoslas nosotros, difundí, acompaña, apoya su lucha, ésto tiene que parar, puede ser tu novia, tía, prima, hermana, amiga o mamá, no esperes que te toque para actuar. Se nos están llevando a las pibas, algunas criaturas quedan sin su mamá, ¿cuánto más hay que esperar? para ponerle punto a ésta locura que cada vez se descontrola más. Y uno se pone a pensar, ¿en qué momento perdimos la brújula como sociedad?



"Hay criminales que proclaman tan campantes 'la maté porque era mía', así no más, como si fuera cosa de sentido común y justo de toda justicia y derecho de propiedad privada, que hace al hombre dueño de la mujer. Pero ninguno, ninguno, ni el más macho de los super machos tiene la valentía de confesar 'la maté por miedo', porque al fin y al cabo el miedo de la mujer a la violencia del hombre es el espejo del miedo del hombre a la mujer sin miedo."